Grupo de Crecimiento Personal

Nuestro Grupo de Crecimiento Personal parte de la idea de que las personas somos seres sociales y nuestra esencia se ve reforzada en la interacción con los demás; es decir, juntos somos más nosotros mismos y llegamos más lejos que estando solos. Creemos especialmente importante en estos tiempos de individualismo alienante y digitalidad irreal, generar y sostener una comunidad basada en el compromiso, la creatividad y la compasión.

La nutrición emocional es la base de este curso. Nutrirse emocionalmente es cuidar  los cuerpos que nos conforman, los que no se ven y no se tocan, pero sí que se perciben y se sienten. Nos referimos a la estructura mental y espiritual, así como las emociones y sentimientos. En nuestros talleres trabajamos con lo que para nosotras es la parte más importante de un ser humano, el «corazón», pero no el físico, sino aquel que llamaríamos el alma o el ser superior. Así que si te apetece cuidar tu «corazón» aquí tienes una oportunidad de oro para aprender a hacerlo.

Este es un curso que ofrecemos para todas las personas que deseen cambiar de hábitos, resintonizarse y conocerse mejor. Si estás en ese momento de  tu vida en el que por necesidad, o por el simple placer de evolucionar, te apetece hacer algo distinto, los grupos de crecimiento personal NEAC son una buena opción.

Los participantes del Grupo de Crecimiento personal se propondrán una serie de objetivos personales al inicio del curso, sobre los que trabajaremos de forma individual y con el apoyo del grupo. Nuestra misión es que al terminar el curso hayas logrado encaminarte hacia esos objetivos u otros que hayan surgido a lo largo del año, pero sobre todo que tengas las herramientas para conocerte, nutrirte y llevar una vida alineada y congruente.

El Grupo de Crecimiento personal está dirigido a todas las personas que creen que pueden hacer algo por sí mismas y que desean responsabilizarse de su vida. Es para personas que creen que necesitan un cambio, que quieren conocerse mejor, que están atrapadas en algún patrón que ya no quieren en sus vidas (tabaco, mala alimentación u otros hábitos nocivos), que se sienten estancadas en sus rutinas, que están atrapadas en relaciones infructuosas, que buscan aprender a nutrirse a todos los niveles (físico, emocional, mental, espiritual), que quieran crecer y florecer junto a otras personas.