Las Flores de Bach las pueden tomar sin ningún problema las mujeres embarazadas, los niños y los bebés.

Los problemas más comunes de los bebés suelen ser resfriados, tos, vómitos, a veces fiebre y también suelen tener problemas de la piel como el sarpullido del pañal o la costra láctea.

Otro tipo de problemas son los emocionales, tales como por ejemplo que el bebé desea ser cogido y abrazado constantemente, o bebés con mucho genio, o los bebés que no se quejan por nada incluso teniendo el pañal sucio.

Muchos de estos problemas no son graves, no obstante, vamos a ver cómo podemos ayudar a los bebés en estos temas con las flores de Bach.

Todos los niños son diferentes y ha de considerarse por tanto su carácter individual al elegir los remedios que los ayuden.

Para los bebés haremos el preparado floral con glicerina vegetal o vinagre de manzana o también puede ser únicamente con agua. Se prepara un cuentagotas con agua mineral y un dedo de glicerina vegetal o vinagre de manzana, y añadimos 4 gotas de cada una de las flores de Bach seleccionadas.

Comencemos pues por los problemas emocionales que puede tener un recién nacido. No nos olvidemos que la mamá también debería tratarse con flores de Bach para ayudar a su hijo en el proceso de cambio en cuanto a los patrones que ella misma esté transmitiendo al bebé.

Cuando en niño quiere que le tengan en brazos constantemente utilizaremos la flor de Chicory que ayuda en el desapego y la flor de Walnut que ayuda en los cambios.

Si el bebé llora mucho y tiene mucho genio le administraremos Impatiens y Holly. Impatiens para calmarle y Holly para el enfado o disgusto.

Si es un bebé que no se queja por nada, que sonríe, aunque esté todo enrojecido y escocido por el pañal, le daremos Agrimony, que le ayudará a avisarnos y a manifestarse cuando algo no va bien.

Si no sabemos qué le pasa, además de llevarle al médico podemos darle el remedio de Urgencia, unas pocas gotas disueltas en el biberón del agua y se calmará.

Con las flores de Bach también podemos ayudar con cremas a los bebés. Para la irritación o sarpullido del pañal podemos añadir en la crema que habitualmente le ponemos al bebé una dilución de las siguientes esencias: Beech y Willow para el escozor, Agrimoni y Holly para las rojeces y dolor y el Rescue Remedy. Haremos un preparado de estas esencias y pondremos 10 gotas en la crema habitual, o bien 10 gotas en un cuenco con agua y con una gasa lo aplicaremos 3 veces al día.

Además de todo esto no nos olvidemos de la personalidad del bebé, nada mejor que los padres para definir un poco más este aspecto y poder así hacer un tratamiento más completo.

Las flores de Bach son estupendas para niños y bebés y sus efectos beneficiosos se perciben enseguida. Te animo a que si eres mamá las pruebes, solo podrás decir: “Tenía que haberlo hecho antes”.